domingo, 30 de mayo de 2010

Otro inciso (o no) - Ha muerto Dennis Hopper

Por dejarnos películas como Easy Rider, por participar en Gigante, Rebelde sin causa, La leyenda del indomable, Apocalipsis Now, Terciopelo Azul o El amigo americano (una de las películas favoritas de mi santo) entre otras, ojalá que ruedes con tu moto por las carreteras que tu elijas, Dennis, y que por fin encuentres tu destino.

Un inciso (o no)... Goran Bregovic en directo en Murcia

 Como descubrí a Goran Bregovic hace muchos años gracias a las películas de Emir Kusturica, supongo que puedo traerlo aquí sin que "cante" demasiado. Pero es que seguía emocionada desde anoche, después de haber visto uno de los conciertos más divertidos que recuerdo, quizá sólo comparable al concierto que este mismo señor dio hace unos cuantos años en el mismo escenario en que lo vi anoche: Goran repetía con Murcia, y yo también con el.
La Plaza Belluga de Murcia (donde está la Catedral), bullía de gente que esperaba con impaciencia la aparición del hombre de blanco y su banda.  El escenario, plantado delante de la fachada principal de la Catedral, era un marco muy apropiado para el concierto, aunque sobraban las sillas. En la anterior ocasión en que Goran estuvo en Murcia pasó lo mismo: ¿cómo es posible que para un concierto así se pongan sillas para que la gente vea el concierto sentado? Imposible no moverse con esa música que llenaba el cuerpo de ritmo, y así paso. En menos de media hora la mayoría de los que asistían y que veían sentados el concierto, se pusieron en pie para bailar al ritmo que marcaban Goran y su banda. Y, como en la ocasión anterior, no defraudaron y nos dejaron para el arrastre cuando terminaron.
Con su banda de bodas y funerales, compuesta por 6 músicos serbios y 2 cantantes búlgaras, Goran hizo que media Murcia bailara anoche al son de su música, de gitanos, de ritmos que te mueven los pies aunque no quieras. Un público entregado hizo el resto para completar una noche maravillosa.
El músico supo mezclar temas para bailar sin parar con otros temas para escuchar (y para que pudiéramos recuperar el resuello, jajaja), y dejó para el final la gran explosión: "Kalashnikov". Sorprendente que siendo como soy pacifista convencida, me pasara un buen rato pidiendo a gritos un kalashnikov, XD. El bueno de Goran nos concedió la petición y terminó con esta canción que fue como si una multitud enloquecida alcanzara un orgasmo simultáneo entre espasmos: Miraras donde miraras, sólo veías gente sudorosa retorciéndose al ritmo de la música.
A mi, hoy, todavía me duelen los huesos.
 Para saber algo más de el, si te interesa, su página web

viernes, 21 de mayo de 2010

The Rocky Horror Picture Show - Jim Sharman (y Richard O'Brien)


“No lo sueñes, hazlo”.
Ésta quizá debería ser siempre la consigna, hacerlo en lugar de soñarlo, no dejar nada en el tintero, por eso hoy quiero acercarme al universo “horrorita” y a ésta película de culto que es “The Rocky Horror Picture Show”.

Cuando en el verano de 1973 se estrenó en el Royal Court Theatre este musical teatral sin muchas pretensiones, su guionista (Richar O’Brien) y su director (Jim Sharman) no imaginaban el monstruo que estaban creando.  La obra fue un éxito, tanto que en 1975 se rodó la película, donde participaba parte del reparto original. Pero como pasa con las cosas buenas, en sus inicios no fue bien recibida y quedó relegada a cines alternativos y sesiones de media noche. Esta circunstancia fue la que provocó que se hiciera de un público fiel que empezó a acudir todas las semanas a los pases. Y con las repetidas exhibiciones, ese público fue perdiendo la vergüenza: cantaba las canciones, hablaba con los personajes, se disfrazaba y utilizaba “props” (utillería). Toda una parafernalia que se organizó alrededor de la película y que sigue haciéndose en nuestros días.
Porque The Rocky Horror Picture Show es una de las películas más exhibidas de la historia del cine, actualmente se hacen pases mensuales en algunas ciudades y pases esporádicos en otras. Yo tuve la suerte de perder la “virginidad” (así se les llama a los que acuden por vez primera a un pase de The Rocky) hace unos cuantos años en la sala de un centro cultural de Murcia, y estoy deseando repetir la experiencia.

En mi caso, la utillería necesaria para interactuar con la película nos la proporcionó  el mismo centro cultural, aunque si en tu ciudad la exhiben y no quieres perdértela, lo mejor es que lleves lo que necesitas desde casa. Los “props” necesarios son:

Globo: Hay que explotarlo al principio de la película, cuando los labios canten “But when worlds collide”.
Arroz: En la boda, cuando los novios salgan de la iglesia.
Periódico: Utilízalo para cubrirte la cabeza de la lluvia (lo hace la protagonista, Janet, al salir del coche).
Pistola de agua (llena): Se dispara a diestro y siniestro cuando Brad y Janet salen del coche y se mojan.
Linterna o encendedor: Enciéndelo cuando los protagonistas canten “There’s a light”.
Carracas y matasuegras: A la vez que lo hagan los transilvanos.
Guante de goma: Cuando el Dr. Frank – N – Furter nos presenta su creación, chasquea los guantes. Nosotros también.
Confetti: Los transilvanos lo lanzan cuando el Dr. Frank y Rocky se dirigen al dormitorio. Nosotros con ellos.
Papel higiénico: Se lanza al aire cuando Brad grite “Great Scott!”
Gorrito de fiesta: ¿Fiesta de cumpleaños? Cuando el Dr. Frank cante el “cumpleaños feliz”, nos lo ponemos.
Cartas (de baraja, nada de las cartas del novio/a, jeje): Cuando el Dr. Frank cante “Cards for sorrow, cards for pain”, las lanzamos por todas partes.


En las proyecciones de la película es muy probable que encuentres “Cast”, que son un grupo de gente que actuarán antes, durante o después de la película, cantando las canciones o representando las escenas que ves en pantalla, y animando (más si cabe) la proyección.

En cuanto a la película en si, el argumento gira en torno a una pareja Brad (Barry Bostwick) y Janet (una jovencísima Susan Sarandon), que piden ayuda en un castillo porque su coche se ha estropeado. Como llueve, los invitan a entrar dentro, y allí conocen a Riff  Raff (Richard O’Brien, el creador de la obra teatral y la película), a Magenta (Patricia Quinn), al Dr. Frank – N – Furter (un desatado Tim Curry), a los transilvanos que celebran su convención (del planeta Transexual, en la galaxia de Transilvania) y a Rocky Horror (Peter Hinwood), la criatura que el Dr. Frank ha creado simple y llanamente para tener sexo con el.

Sorprende ver a Susan Sarandon en una de éstas, se nos presenta tan joven que supongo que fue una de sus primeras películas, aunque el que realmente se come la pantalla es Tim Curry, un Dr. chiflado vestido con corsé, medias, liguero y tacones, con el pelo rizado y los labios muy rojos, que mezcla a Mick Jagger con Freddie Mercury para crear un personaje excepcional e inmortal.

La película tiene unas canciones maravillosas para cantarlas “a grito pelao” y para que se te vayan los pies de la butaca. Las canciones las tengo en un CD que me pongo en el coche cuando viajo sola y puedo cantar a gritos sin molestar a nadie, es un ejercicio anti-estrés muy recomendable, cuando terminas te quedas nuevo.

Así que no lo pienses más, normalmente cuando se hacen pases de la película en ciudades que no son Madrid o Barcelona, te informan en el periódico de dónde y cuándo se va a producir tamaño desmán, porque esta película hay que verla en el cine, nada de ordenador o dvd, hay que mezclarse con los “horroritas” (los que ya la han visto varias o muchas o infinitas veces) y perder la “virginidad” de una de las maneras más divertidas que puedas imaginar.
Ya lo sabes: “No lo sueñes, hazlo”.

Por cierto que la próxima exhibición de la película será el sábado 5 de junio, a las 22:00 h. en los cines Casablanca de Barcelona. Las entradas ya están disponibles en taquilla o a través de Paypal. Lo organizan desde la web www.rhps.es   que es también de donde he obtenido alguna de la información que he traído aquí, aunque si queréis saberlo todo sobre esta película, no dudéis en visitar la página, porque es genial.


lunes, 17 de mayo de 2010

Persépolis - Marjane Satrapi


Ser mujer, en muchos países, no es taréa fácil; cuando el régimen es fundamentalista islámico, la cosa se pone verdaderamente difícil, y más todavía si tu educación ha sido a lo "occidental" y tu familia es progresista y no comulga con las ideas del régimen. Conoces que se puede ser mujer y libre en otros lugares, ¿por qué en tu país no? Lo único que  crees que te queda es la rebeldía, que es también lo que más problemas puede ocasionarte.

"Persépolis" es la historia autobiográfica de Marjane Satrapi, desde su infancia hasta que se convierte en una mujer, es la historia de una rebeldía, de una huída, de una vuelta a los orígenes, de empezar la revolución desde dentro, de intentar mantener tu identidad. Contada con sencillez y por eso tal vez más impactante.

Como en muchísimas otras ocasiones, "Persépolis" antes que película fue libro, aunque en esta ocasión se trata de un cómic, sin colores, en un sobrio blanco y negro que se mantiene en el film y que es perfecto para lo que se cuenta y cómo se cuenta.
Porque provoca emociones: reirás, llorarás, te indignarás y te preocuparás. Porque creo que es indispensable para conocer un poco más de las mujeres de otras culturas y porque no te dejará indiferente, "Persépolis" es perfecta para disfrutar aprendiendo.

Una página del cómic extraída de la página web www.guiadelcomic.com 

jueves, 13 de mayo de 2010

El extranjero loco (Gadjo dilo) - Tony Gatlif

Stéphane es un joven francés que viaja a Rumanía
buscando a una cantante gitana que escuchaba su
padre poco antes de morir. Sus cintas de cassette, con
el nombre de la cantante, Nora Luca, forman parte de
su escueto equipaje. Y se necesita poco más cuando
tu mente y tu alma están totalmente abiertos a lo que
venga, sin prejuicios y sin miedos. Stéphane busca algo
concreto y encuentra mucho más de lo que imaginaba:
una etnia diferente, amor, raíces y mucha música.
Encuentra sus raíces alejado del lugar al que
supuestamente pertenece y con unas personas con
las que quizá no habría tenido ningún trato en Francia.
El viaje de Stéphane se me sugiere como una búsqueda
de identidad, cualquier excusa es buena para lanzarte
a buscar. Si encuentras, quédate. No hay fronteras.
Y si te ofrecen música, música como hilo conductor de
tu vida, esa que te alegra el corazón o te lo llena de
nostalgia, no lo pienses y quédate.

miércoles, 5 de mayo de 2010

La carretera (The road) - John Hillcoat

Antes que la película fue el libro, uno de los más duros que he leído junto a "Un mundo feliz" de Huxley o "Farenheit 471" de Bradbury, por poner algunos ejemplos. El libro se titula igual que la película, y su autor es Cormac McCarthy (premio Pulitzer por este libro, y autor, entre otros, del conocido "No es país para viejos").

"El hombre es un lobo para el hombre" decía Plauto hace más de 2000 años, y creo que no se equivocaba. Verdaderamente esta afirmación, que recuerdo cada vez que leo alguno de estos libros, es la que me produce terror. Nada de monstruos ni de fantasmas, si a algo le temo es al mismo hombre. Y aún así siempre busco la cara amable, un resquicio de esperanza, cualquier muestra de que no todo está perdido, que el mundo apocalíptico (en cualquier sentido, no sólo en el del "fin del mundo") que está por llegar y que se nos presenta tan crudamente en estas historias, siempre es postergado por las buenas acciones del hombre. 

Esperaba con ansia ver esta película, no sólo por comprobar si el director había sido lo suficientemente fiel al libro, sino también por la participación de Viggo Mortensen y la banda sonora de Nick Cave (los papeles de Robert Duvall, Guy Pearce y Charlice Theron son muy breves).Quería saber qué tal había quedado el conjunto, si lo que yo imaginé leyendo el libro también lo había imaginado el director, y la verdad es que no me defraudó.

En un mundo post-apocalíptico, un hombre y su hijo caminan por una carretera en busca de la costa para encontrar un lugar donde vivir. El agua está contaminada, los árboles muertos, no hay animales, y los hombres que no han sucumbido al caos son caníbales o están locos. No hay lugar para la cordura ¿o si? Viggo y su hijo son la humanidad que nos queda, son el resto de la familia, del amor. Su instinto de supervivencia se ha desarrollado ante el caos que les rodea, pero no dejan de lado los rasgos que les hacen verdaderamente humanos. 
Esta es una historia fantástica del amor de un padre hacia su hijo, y de todo lo que tiene que hacer para salvarlo. No se si queda algo para la esperanza, pero yo quiero pensar que si, quizá es que siempre he sido optimista, quizá es que el horror es inimaginable.

martes, 4 de mayo de 2010

¡Qué ruina de función! - Peter Bogdanovich


La risa es uno de los alimentos del alma. Cuando reímos ponemos en funcionamiento los músculos, liberamos endorfinas e incluso reducimos el colesterol en sangre pues es equivalente a un ejercicio aeróbico. La risa produce efectos beneficiosos en nuestra salud, tanto física como mental, y es uno de los elementos que consigue aplacar la ira del ser humano. Con tanta buena aportación, mi recomendación sería que riamos más, mucho más, hasta hartarnos, hasta que nos duela, hasta decir ¡basta! ¿Qué importan unas arruguillas extra si el causante es la risa? ¡Que nos quiten lo "bailao"!


Peter Bogdanovich dirige una película llena de buenos actores en la que ninguno es protagonista y todos son protagonistas: Michael Caine, Carol Burnett, Christopher Reeve, John Ritter, Denholm Elliott, Nicollette Sheridan y Marilu Henner entre otros, forman el elenco de una obra teatral. La película nos cuenta desde los ensayos hasta el estreno y el posterior desarrollo de la obra de teatro durante la gira, con escenas donde vemos cómo se representa la obra sobre el escenario y lo que ocurre con los actores entre bambalinas.

Una deliciosa comedia coral donde te partirás de risa. Memorable la escena de las flores y el cactus, por destacar alguna de las más divertidas.

Si tienes un mal día, si te sientes triste, apagado, melancólico, sin ganas de nada, no tomes medicinas: enchufa el DVD, ponte esta película, y si cuando termine no ves las cosas de otra forma, al menos nadie te podrá quitar los momentos divertidos que esta peli te va a proporcionar.

Y si no... ¡sardinas!